Ainhoa Frutos Gómez

Mención Especial



Ainhoa Frutos Gómez tiene actualmente 13 años y ya desde bien pequeña, empezó a practicar deporte. Con apenas tres años comenzó en la Escuela Municipal de Gimnasia Rítmica, en la que estuvo varios años, pero su gran pasión era el fútbol. Por ello, en 2013 cambió las lentejuelas de los trajes de gimnasia y las acrobacias por el balón y cambió la modalidad.

Empezó a entrenar en las escuelas deportivas, pero en la de fútbol sala. Allí estuvo durante cuatro años y en ese tiempo su afición por el fútbol no hizo nada más que aumentar. En 2017 pasó a formar parte del Féminas de Don Benito, rodeada de otras niñas que también eran aficionadas al balón, algo que sirvió para que su pasión y afición por este deporte siguiera creciendo. Por eso, lucha por ser mejor cada día con el apoyo de sus padres y de su familia.

Ainhoa Frutos tiene ya un referente, que es además otra chica, Alexia, del Fútbol Club Barcelona, porque niñas como ella, con su amor por este deporte y sus ganas de luchar y mejorar cada día, ayudan no sólo a sentirse bien por practicar el deporte que les gusta, sino que sirve como herramienta para conseguir la igualdad entre hombres y mujeres.

Ainhoa ha tenido que superar muchos estereotipos y ha tenido que moverse y desplazarse para poder seguir haciendo lo que más le gusta, porque aún hoy es difícil que las niñas puedan practicar y entrenar al fútbol de forma regular, pero, gracias al esfuerzo y ganas de chicas como Ainhoa, seguro que poco a poco y pronto será cada vez más habitual que haya equipos femeninos en los pueblos.

Además, durante el tiempo de pandemia, ha sufrido las limitaciones y restricciones que hemos sufrido todos debido al Coronavirus, pero eso no le ha impedido seguir practicando y seguir apasionándose por su deporte favorito. Eso sí, con mucho esfuerzo, pero todo ello le ha llevado a no abandonar su pasión y aumentando sus ganas de llegar lejos.

Esperemos que algún día Ainhoa se convierta en referente de algunas niñas que empiezan a practicar fútbol en Guareña y que no pierda la ilusión por el balón.