Las Marchas de la Dignidad Madrid 22M, la que ha sido probablemente la mayor movilización ciudadana desde la muerte del dictador Franco, tiene los pies descalzos. Y es así porque nace desde abajo, de los que no tienen nada, de los que lo han perdido todo, de los parias, de los nadie que decía Eduardo Galeano, de aquellos de los que decía el subcomandante Marcos que «nunca se ocupan los grandes medios de comunicación y que no aparecen en los noticieros nada más que cuando matan o cuando son muertos». Lo que luego fue una movilización sin precedentes nace por primera vez sin el apoyo de los grandes partidos y sindicatos. Lo impulsan en sus inicios el Sindicato Andaluz de Trabajadores, los Campamentos Dignidad de Extremadura y el Frente Cívico y a partir de ahí se unen asociaciones de parad@s, plataformas de afectad@s por las hipotecas, las diferentes mareas en defensa de los servicios públicos, pequeños partidos, sindicatos minoritarios, asociaciones de vecin@s, movimientos sociales feministas, ecologistas, etc.

Organizad@s en diferentes columnas en cada territorio comenzamos el camino a principios del pasado mes de Marzo, en nuestro caso, desde Mérida. Los pueblos por los que pasábamos nos recibían con los brazos abiertos. Recogíamos su ánimo y solidaridad que nos daban fuerzas para continuar hasta nuestra meta.

Después de dos semanas atravesando Extremadura y Castilla La Mancha llegamos a Madrid el 22 de Marzo. Una marea humana inundaba la Plaza de Atocha y la Columna Andalucía agitando la arbonaida nos abría un paseíllo al grito de «¡Andalucía con Extremadura!». Galleg@s, vasc@s, murcian@s, catalanes, valencian@s, madrileñ@s etc., congregamos la friolera de entre 1 millón y medio y dos millones de personas para exigir el cese de las políticas que agreden cada vez a más sectores de la población.

El tratamiento de esta enorme prueba de descontento colectivo fue vergonzoso tanto por los medios de comunicación como por el gobierno en cuyas intervenciones se limitó a insultar en los días previos y a cuestiones de orden público en los días posteriores.

El PP y el PSOE se autoregulan entre ellos y todo lo que esté fuera de esa bicefalia les pone nerviosos porque se les escapa de su control. Por eso después de estas marchas han aumentado los desalojos de Corralas y Centros Sociales donde la gente se organiza y piensa por sí misma, donde se llevan a cabo ciclos de cine, charlas, jornadas literarias, etc. Y eso fueron las Marchas de la Dignidad 22M una unión sin precedentes de los diferentes territorios del estado español que continúa su construcción más allá de esa fecha.

El pasado mes de Abril se reunió en Barcelona la Coordinadora Estatal de las Marchas de la Dignidad (CEMD) y se decidieron diferentes acciones de protesta como concentraciones y ocupaciones de más de 400 oficinas de desempleo que se llevaron a cabo el pasado 30 de Abril por toda la geografía española. Se han realizado varias manifestaciones multitudinarias pidiendo la libertad de Miguel e Isma que llevan detenidos desde el 22M.

El próximo 21 de Junio se rodearán todos los Parlamentos en cada territorio como protesta de su sumisión a las directrices del Banco Central Europeo, Fondo Monetario Internacional y la Comisión Europea (Troika) y su capitalismo salvaje. La próxima reunión de la CEMD será en Mérida a finales del mes de junio donde se evaluarán las últimas acciones realizadas y se seguirá trabajando para fortalecer este movimiento de unidad popular que crece día a día para luchar contra las políticas de los gobiernos que estamos sufriendo y que más temprano que tarde acabarán cayendo porque la mañana llegará aunque no canten los gallos.

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